Dominio Propio
Caprichitos, ilusiones, ¿son lo mismo? Realmente no lo sé, pero he cumplido al menos con uno.
Me voy a obligar a actualizar el blog, y no me refiero con posts, sino los enlaces y esas cosas. Hace mucho que no lo hago y realmente leo mucho de lo que no tengo puesto y no leo parte de lo que tengo puesto. ¡¡Pero qué pereza me da!!
¿Y a qué viene todo esto? ¡Pues porque ya tengo dominio propio! www.anazia.net
"Pija" me dijo Onizeth hoy cuando le pregunté por la manera de cambiar el encabezonamiento. Puede llegar a sorprenderme de una manera tan grata que todos esos 4 años han merecido la pena por esos simples momentos. Fue él quien consintió en comprármelo, quien me ayudó a hacerlo, quien me redireccionó la dirección, quien me resuelve la más mínima duda internáutica e informática que tenga.
A ver si hablando sobre ello realmente me decido a realizar los cambios pertinentes que tengo que hacer. La casualidad quiere que cuando tenga ganas, esté ocupada (u ocupado el ordenador) y cuando por fin está a mi alcance... me invade la pereza. Además, lo mismo me pasa con cierta habitación... de cuyo nombre no me acuerdo, ¿dónde estará y qué tengo que hacer? (¿Por qué lo repito tanto y nunca lo hago? Uffff).
Momento desahogo de pereza, ¿creéis que hablando sobre ella la pereza se irá?
Me voy a obligar a actualizar el blog, y no me refiero con posts, sino los enlaces y esas cosas. Hace mucho que no lo hago y realmente leo mucho de lo que no tengo puesto y no leo parte de lo que tengo puesto. ¡¡Pero qué pereza me da!!
¿Y a qué viene todo esto? ¡Pues porque ya tengo dominio propio! www.anazia.net
"Pija" me dijo Onizeth hoy cuando le pregunté por la manera de cambiar el encabezonamiento. Puede llegar a sorprenderme de una manera tan grata que todos esos 4 años han merecido la pena por esos simples momentos. Fue él quien consintió en comprármelo, quien me ayudó a hacerlo, quien me redireccionó la dirección, quien me resuelve la más mínima duda internáutica e informática que tenga.
A ver si hablando sobre ello realmente me decido a realizar los cambios pertinentes que tengo que hacer. La casualidad quiere que cuando tenga ganas, esté ocupada (u ocupado el ordenador) y cuando por fin está a mi alcance... me invade la pereza. Además, lo mismo me pasa con cierta habitación... de cuyo nombre no me acuerdo, ¿dónde estará y qué tengo que hacer? (¿Por qué lo repito tanto y nunca lo hago? Uffff).
Momento desahogo de pereza, ¿creéis que hablando sobre ella la pereza se irá?
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