sábado, julio 15, 2006

Redescubrimientos

Bueno, creo que ya he superado la fase del inconsciente y me encuentro en una etapa de resplandor cegador (como ya predijeron algunos). Así que voy a contar ahora algunas anécdotas de cosas que se redescubren cuando Ithilien o Estel están cerca.

Una de las primeras cosas que redescubrí fue el género de los nenucos. "¡Pero si eso es muy fácil!" dirán muchos por ahí, "Sólo tienes que levantar la falda o bajar los pantalones". Pues no, señores míos, hay que hacerlo sin quitar nada de ropa. En un momento en el que no me lo esperaba Muñeco se convirtió en Muñeca... ¡porque tenía pestañas!

Cuando Ithilien me explicó con una lógica tan aplastante que casi se me salían los ojos el mismo día que llegué que tuvo que cambiar el nombre a su nenuco porque se dió cuenta que tenía pestañas y que por lo tanto era una chica, supe que encajaríamos muy bien.

Al día siguiente me redescubrí a mí con ilusión en los ojos, algo inconsciente todavía (fue el día en el que escribí ese post), pero mucho más ilusionada que cuando dejé mi casa.

Y con el paso de las horas y de los días me es inevitable redescubrirme sintiéndome en mi propia casa. Todavía tengo un camino muuuy largo que recorrer, pero pasito a pasito veo frutos en el camino.

Una de las excusas que doy para venirme es que no encuentro trabajo en Huelva. Cosa muy cierta y desalentadora, y me sorprendió muchísimo darme una vuelta por la Red Araña de aquí y conseguir enseguida una entrevista de trabajo y una orientación magnífica donde sólo les faltaba asegurarme que el trabajo no me faltaría... Espero conseguir todo lo que me propongo, falta me hace.