lunes, agosto 14, 2006

Mi Primer Trabajo

Todo el mundo tiene experiencia laboral de una u otra manera. Yo puedo contar con mis prácticas de empresa, e incluso con unos días de freganchina en el restaurante de un hotel, pero realmente no formaba parte de la plantilla y me sentía más estorbo que otra cosa. Además, las prestaciones que recibía a cambio (en el caso de las prácticas: nulas) apenas llegaban para salir un fin de semana.

Por fin he encontrado un trabajo por mí misma, sin intermediación, y perteneciendo a una plantilla de verdad, con mi seguro médico, con mis ventajas en ventas, etc. Son muy pocas horas, apenas llega para sobrevivir en caso de ser dependiente. Desde luego que no es para buscarte la vida y convertirte en un ser independiente. Pero empiezo a tener líneas para rellenar en el currículum.

Incluso me he llegado a plantear pagar dinero para poder rellenar esas líneas de currículum. Con uno de los cursos a distancia de idiomas y trabajo. No sabría decir ahora a cuál me habría apuntado ni nada, pero me parece muy triste tener que pagar para conseguir un buen empleo.

Estudiar es otra cosa, consigues algo más que una línea para rellenar a cambio de tu esfuerzo. Aprendes cosas, conoces a compañeros, lo que hagas es para tí, no le regalas a nadie tu trabajo.

¡Hasta tengo uniforme! Me gusta trabajar para grandes marcas, aunque me sienta explotada, pero prefiero sentirme explotada ahí que en una empresa pequeña que no conoce ni el hermano del dueño. Me alegra haber encontrado al menos esta oportunidad, aunque no tiene nada que ver con el mío, menos el tema de ponerle cara al público y poner la otra mejilla, al menos tengo esto.

¡Aunque insisto en llamarlo Continente!