viernes, enero 13, 2006

Pobre espalda

23:30. Pensamiento de Anazia: "Bueno, ya es bastante tarde, hoy me quería acostar más temprano, pues nada, a arreglar la cama a dormir y acostarme. Esto lo pongo aquí, encima del escritorio, voy a tener que mover el bolso (pensamiento subconsciente: no pesa más de 1 kg.), lo voy a poner ahí. ¡¡¡Aaaah!!! ¡¡Qué dolor!!".

23:30. Pensamiento de la espalda de Anazia: "La tía ésta se está pasando tela, más le vale tener cuidado conmigo, que no entiende que yo soporto el triple de peso que el que ella coje... Eso de cargar a la niña en brazos... ufff, me mata. ¡Y encima no tiene ni la consideración de tenerme recta! ¿Pero ésta qué se cree que soy? ¿Superman? La próxima que coja algo que supere el kilo, latigazo que le mando. Vaya, qué rápida... ¡¡¡Toma!!!".

El dolor se producía en la parte alta de la columna, así que eso elimina algunos problemas... Casualmente, por teléfono, hablando con una amiga que hace mucho tiempo que no veía ni hablaba con ella, resulta la siguiente conversación:

Anazia: "¡Hombre! ¿Qué es de tu vida?"

Ella: "... ... ... Estoy haciendo un curso para dar masajes..."

Anazia: "Pues hablando de masajes, anoche me dió un dolor raro en la espalda..."

Ella: "Eso es porque desgastas la columna, ¿has hecho ejercicios últimamente con los cuales tengas que agacharte mucho?"

Anazia: "Pues ahora que lo dices, ¿coger una niña de unos 15 kilos en brazos cuenta?"

Ella: "Pues el problema está en cómo te agachas, ¿doblas la columna o las piernas?"

Anazia: "La columna..."

Mi salud se deteriora, el próximo día: estrés postvacacional.